Son tiempos emocionantes para los aficionados de los Dallas Cowboys. Oficialmente, hay un nuevo entrenador en jefe para el equipo que tuvo a Jason Garrett por una década entera a pesar de no encontrar el éxito esperado; el sexto Trofeo Lombardi en la historia de la franquicia. Mike McCarthy es el nuevo head coach de la Estrella Solitaria y hay muchas razones por las cuales estar emocionado.

El staff de coaches está pasando por unos momentos de cambios intensos, con casi todos los entrenadores del año pasado fuera del equipo. Kris Richard, Rod Marinelli, Marc Colombo, Gary Brown entre otros están actualmente fuera de los Cowboys. Los cambios le vendrán bien a un equipo que no había visto muchos en años.

McCarthy está subiendo al barco a sus hombres de confianza y afortunadamente, los nombres que han relacionado con él y Dallas son unos bastante reconocidos por sus carreras exitosas, como el coach de línea defensiva esperado, Jimmy Tomsula.

Pero de todas las razones por las cuales estar emocionados por su llegada, quizá la más grande es que trabajará con el QB Dak Prescott para llevarlo al próximo nivel. Sin duda alguna, el cuarto año de su carrera fue el mejor para el joven mariscal de campo cuando Kellen Moore y Jon Kitna se apoderaron de su desarrollo.

Ahora, Dak tiene la oportunidad de trabajar con el hombre que desarrolló a Aaron Rodgers desde que este llegó a la NFL y el que le dio un segundo empujón al legendario Brett Favre cuando su carrera parecía terminada.

A lo largo de su carrera, McCarthy ha sido identificado como un “guru” de quarterbacks. Y esto va más allá de solo enseñarle fundamentos a sus jugadores, sino a las tendencias y diseño de su ofensiva. Desde que el reportero de NFL Network Tom Pelissero lo entrevistó en noviembre, McCarthy ha hablado de como su ofensiva está hecha principalmente para hacer al quarterback exitoso.

Esto no es una sorpresa en lo absoluto considerando que todos los equipos de Mike han sido principalmente lanzadores. Prescott, quien llegó a la liga en el 2016 con una gran línea ofensiva y un Ezekiel Elliott novato, ha pasado toda su carrera en una ofensiva enfocada en correr el balón.

A pesar de que fueron más agresivos en el juego aéreo en varios aspectos (rutas más largas y agresividad en segundo down, por ejemplo), la evidencia sugiere que los Cowboys no fueron un equipo pasador en el 2019. En primer down, casi toda la temporada vimos a Ezekiel Elliott obtener el balón en la mayoría de las ocasiones.

Todo eso debería cambiar en la ofensiva de McCarthy. Si bien el nuevo head coach dijo en su rueda de prensa que Zeke obtendría el balón, es difícil imaginar que lo hará tanto como en sus primeros cuatro años en la NFL.

Según datos de Pro Football Focus, los Packers fueron el equipo más pasador entre 2014 y 2018 mientras que los Cowboys fueron de los menos. Además, uno no puede ignorar los comentarios de McCarthy de como estudió el tema de “analytics” durante su año fuera de la liga. Si algo sugiere la evidencia presentada por dicha tendencia, es que los equipos tienen que lanzar aún más el balón.

Todo esto y más apunta a que Dak Prescott tendrá un año importante en su primer año con un coach distinto a Jason Garrett. Aún falta mucho para la temporada, pero uno podría asumir que el 2020 podría ser el mejor año para Prescott en su carrera.